Para Marzo del 2020, “teletrabajo”, “home office” y trabajo remoto se veían en el panorama laboral solo como beneficios para los colaboradores en cualquier ámbito posible. Y, a pesar de disponer de una gran oferta en el mercado, no fue hasta la llegada de la pandemia a nuestro entorno laboral que las herramientas tecnológicas empezaron, literalmente, a cotizarse en bolsa.
De una semana a otra, saltamos de tener reuniones en salas de juntas, a hacerlas en la sala de nuestra casa. El manejo de nuestros proyectos cambió sustancialmente y la misma interacción con nuestros equipos, se convirtió en todo un reto creativo.
Y justamente para alivianar esta nueva dinámica a la que tuvimos que adaptarnos, las compañías de desarrollo de software redoblaron sus esfuerzos para poner a nuestra disposición un abanico de herramientas que un abrir y cerrar de ojos, hicieron de nuestro teletrabajo, un lugar mucho más tecnológico y llevadero.
¿Cómo conservaríamos nuestra interacción como compañía?, tanto al interior de esta cómo con nuestros clientes, fue nuestro primer gran reto.
Y como en un gran baile de salón, Zoom llegó a nuestra puerta a marcar el compás del vals llamado “audio y video conferencias”. Pero los demás no se quedarían sin disfrutar de esta pieza, Microsoft hizo lo suyo y renovó Teams, incluyendo funcionalidades que le dieron a las compañías una nueva dimensión en cuanto a interacción se trata. Google hizo lo propio también con Google Hangouts, GoToMeeting se consolidó como uno de los proveedores de video conferencias más grandes en el mundo y Discord apareció en el panorama, ya no solo como una plataforma para gamers. La nueva oferta de herramientas, de pronto, transformó nuestra forma de interactuar y hoy en nuestra barra de aplicaciones favoritas, encontramos, sin lugar a dudas, alguna de las aplicaciones anteriores.
Y mientras veíamos pasar bloopers de como las reuniones que antes conservaban cierto nivel de etiqueta, se convertían en divertidos momentos, programar nuestro tiempo, el de nuestro equipo, las tareas y el manejo de nuestros proyectos, también dio grandes frutos. Conocíamos de la vieja escuela las soluciones Kanban como Trello y Microsoft Planner, pero no imaginábamos que serían la piedra angular de la organización de nuestro teletrabajo. Planear, con la ayuda de estas herramientas, sin duda tomo una connotación muy diferente, y hoy, el monitoreo en línea de nuestros equipos, de nuestros proyectos, la actualización de nuestro progreso diario y en general de todo nuestro trabajo, está al alcance de un click, no solo en nuestros ordenadores sino también en nuestro dispositivo móvil.
Y de la mano con encontrar la mejor forma con organizarnos, también llego a nuestro día a día la temida Virtual private network, más conocida en el nuevo mundo como VPN, que no solo permitió la conexión entre todos los ordenadores de la empresa aun estando de forma remota, sino que también nos dio una nueva dimensión en cuanto a la confidencialidad y la seguridad de la información al interior de la compañía. Y es que de la mano de la VPN hoy despierta nuestro ordenador, y con la bendición de la VPN, se acuesta a hibernar.
Pero sin duda un gran aliado y ganador al bailarin tecnológico más completo para el entorno empresarial en tiempos de teletrabajo, se lo lleva Microsoft, con una completísima suite de 30 aplicaciones que van desde los ya conocidos y renovados Word, Excel y Power Point, hasta el completísimo CRM Dynamics 365. Que aparte de estar a la vanguardia en términos experiencia de usuario, abre cada día más la interacción a nuevas integraciones de aplicaciones pertenecientes a casas diferentes a Microsoft.
Estaremos hoy, gracias a la pandemia, en un 15% de la exploración de todas las herramientas que existen en el mercado, sin embargo, la gran apuesta que hoy debemos hacer, teniendo en cuenta que el teletrabajo llegó para quedarse, es sin duda, a revolucionar la forma de trabajar buscando la mayor eficiencia ¡Con la ayuda de la tecnología!.
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